19 octubre 2010

Otras imágenes de este tiempo

Tenemos otras imágenes de este tiempo, a través de ellas se puede apreciar aspectos de la vida cotidiana, social, comercial de este pueblo, el desarrollo y la pobreza existente, algunos elementos de su cultura. Nos acercamos a la realidad apreciando las imágenes, aunque sabemos que para descubrir el interior, el espíritu de este pueblo hay que ir más allá de lo virtual, hay que experimentar, hay que vivir, hay que estar...

La curiara es el transporte fluvial de numerosas personas que viven en pueblos y caserios a las márgenes del gran río Orinoco, tanto de nuestro Estado Bolívar bañado por la orilla sur, como la de los Estados Guarico y Apure bañado por la orilla norte y limítrofes con nuestra Misión

Aunque los misioneros utilizamos también el transporte fluvial, y algunas veces el aéreo, principalmente nos movilizamos en vehículos rústicos, necesarios para llegar a muchos de los rincones del Municipio Cedeño, que coincide geográficamente con la Misión que tenemos encomendada, 45.000km.2
Se aprecia en la foto al P. Juande llegando a la casa parroquial después de atender diversas comunidades el fin de semana. Este vehículo ha sido reparado por el Seguro después de un accidente,sólo que han tardado 8 meses en entregarlo, y ha supuesto un gran perjuicio para nuestra labor durante todo este tiempo.

El P. Juande, acompañado por el P. Sabino (izquierda), jesuita responsable regional de los Cursos de Capacitación Laboral "Cecal", visita la empresa brasileña "Odebrech" constructora del tercer puente sobre el río Orinoco, que unirá Caicara del Orinoco en el Estado Bolívar con Cabruta del Estado Guarico, por la parte de Punta Brava, unos 5 km. de separación de una orilla a otra

Tuvieron la oportunidad de llegar y ver de cerca en curiara, la plataforma de uno de los pilares más importantes que se construye del puente.
Esta obra se inició aprox. hace cinco años, preveemos que quedan otros tantos para su conclusión. Es una inversión importante para el desarrollo de esta región que está generando empleo, aunque según analistas, también invasiones, crecimiento indiscriminado de la población que busca en la ciudad mejoras de vida, y como consecuencia, pobreza y aumento de la delincuencia.

Gabarras subiendo el río Orinoco a su paso por Caicara. Se dirige al puerto del Jobal para cargar el mineral de bauxita que se extrae de la Mina de Los Pijiguaos, después retornará 600 km. hacia la ciudad de la siderúrgia, en Puerto Ordaz, donde será procesado y convertida en aluminio

A pesar de todo este desarrollo y riquezas naturales que existen en el subsuelo de este Estado, muchos de sus habitantes, siguen cocinando a leña, sobre todo en los campos, a pesar de que Venezuela tiene grandes reservas de gas natural. Desde hace varios años hay problemas en el suministro del gas a la población, hay que hacer grandes colas para obtenerlo.

Y aunque esto forma parte de la cultura de numerosas comunidades rurales, hoy se ha incrementado y muchos optan por cocinar a leña. En la imagen, preparando un buen Zancocho. Los gastrónomos, dicen que la comida cocinada a leña es mucho más sabrosa...

Aspecto de la venta de queso y carne al aire libre, en la Avenida Carabobo de Caicara del Orinoco



Mercadito de frutas y verduras en la misma Avenida, centro neurálgico de esta ciudad

Junto a la orilla del Orinoco, terreno y cancha rústica para "Bolas criollas", juego deportivo muy popular y arraigado en la población venezolana. Suele haber grande competiciones, sobre todo en eventos especiales, como las Fiestas Patronales.

El profesor de cultura de la Escuela "Manrique", Genaro Puerta, inculca el sentido y rescate de los valores tradicionales a sus alumnos, entre ellos, los valores religiosos...

... además de los folklóricos y musicales. En la foto alumnos con el traje típíco de "liquiliqui"

Alumnas con el tradicional vestido de "joropo" que embellece el folklore nacional y tradicional

Profesores de cultura con sus alumos

Aunque resaltan y desarrollan en sus celebraciones y fiestas el "Joropo" máximo exponente de la cultura y expresión musical autóctona, también los caicareños aprecian el folklor latinoamericano, sobre todo el mexicano, y gustan de brindar a los agasajados en los grandes eventos, canciones interpretadas por "mariachis".
El P. Juande, como buen conocedor de esta inclinación, y como buen mexicano, todos los domingos dirige durante dos horas en la noche un programa radial de música mexicana, a través de la cual va dando consejos y orientando en valores humanos y cristianos a los oyentes.

Tampoco puede faltar en las grandes ocasiones la correspondiente piñata, apreciada por todos, y en especial por los niños



Momento en que el P. Manolo se dispone a bendecir una ambulancia que el Ministro Elias Jaua donó a la población de Caicara, varios días antes de las elecciones parlamentarias.

Este es el típico "ranchito" de zinc que se puede apreciar en numerosos barrios humildes de nuestra localidad. Las familias que pueden, poco a poco, según sus posibilidades, van construyendo junto a su "ranchito" de zinc o de madera, su casa de bloque, ya que todos quieren vivir con dignidad y salir de la marginalidad. Todavía queda mucho por hacer en el país en este sentido.

Conversando y dando el pésame a una familia humilde a las puertas de su casa, donde están velando al difunto.

Niño indígena mojado por la lluvia

Niños indígenas en clases de apoyo. Zona de Pijiguaos

Niñas durante las clases de apoyo que oferta nuestra Iglesia en la zona de Morichalito

2 comentarios:

isa dijo...

Estimado P Manolo: Busco, "Diocesis de Málaga.org" las noticias "Desde Caicara". Hace ya cuatro años que estube alli,durante un mes, compartiendo con Vs pequeños trabajos
que fueron una gracia de Dios. Sigo encomendandoles en mis oraciones.
Mi dirección de correos es
>>isamoma62@gmail.com>>>
Saludos cordiales
Isa

Raquel dijo...

padre manolo, como siempre genial. Seguimos por aquí ubicándonos, estuve en su casa y conocí a su mamá fantástica, es una mujer increible y perdonmene la tardanza. Estamos pendientes de hacer el testimonio pero aunque trabajamos juntas no paramos y el tiempo escasea pero lo haremos, prometido.
mil besos
raquelilla