19 noviembre 2007

Carta Pastoral Conjunta




EL ARZOBISPO Y LOS SACERDOTES DE LA ARQUIDIÓCESIS DE CIUDAD BOLIVAR

A todos los fieles de la Arquidiócesis,

SALUDO FRATERNO EN EL SEÑOR JESUCRISTO

Con todo respeto, consideración y afecto que uds. nos merecen, y en ejercicio de nuestra misión sacerdotal, que nos impulsa a considerarlos como hermanos, a los cuales debemos servir, no solamente en lo referente a su vida cristiana, sino también a la problemática inherente a la vida social, nos dirigimos a Vds. para manifestarles lo siguiente:

1. Es bien sabido por todos que Venezuela atraviesa por una situación particularmente difícil, en la cual se juegan el futuro, la convivencia, la paz, la libertad de la República. Nos referimos evidentemente al Referendo que ha sido convocado para aprobar o rechazar el cambio propuesto a nuestra Constitución.

2. Ahora, bien, los Obispos, buscando únicamente el bien de toda la sociedad, han levantado su voz de alerta mediante una Exhortación pastoral, con orientaciones muy claras y precisas, dirigida a los católicos y a los hombres y mujeres de buena voluntad, sobre los peligros que encierra la Reforma propuesta.

3. Nosotros, como Sacerdotes de esta arquidiócesis, unidos a nuestro Arzobispo, queremos ante todo, manifestar nuestra adhesión al colegio episcopal, agradecerle su preocupación por Venezuela y su pueblo, y hacernos eco de su Mensaje.

4. Consiguientemente, hacemos un llamado a todos para que procuren responsablemente conocer el cambio que se propone para nuestra Constitución, y el Mensaje de los obispos sobre el mismo, que resumimos a continuación:

Dicen nuestros obispos:

a) “Punto central de esta Reforma es que Venezuela pase de ser un “Estado democrático y social de derecho y justicia” a ser un “Estado socialista”.

b) En un Estado democrático pueden existir partidos socialistas y gobiernos socialistas, al igual que cualquier otra opción político-partidista. En cambio, en un Estado socialista toda la actividad política, social, económica y cultural se encuadra dentro de una única opción, un pensamiento único.

c) “Un Estado socialista es contrario a la naturaleza personal del ser humano y a la persona. Conforme a la enseñanza de la Iglesia, la persona humana, el pueblo, y no el Estado, son el centro de toda la vida social.

d) En ese Estado socialista, el mismo y el Gobierno estarían dirigidos por un Presidente que puede ser reelecto continuamente, con un poder amplísimo que le permitiría disponer de las instituciones, propiedades y recursos. Esto es verdaderamente grave y modificaría la estructura fundamental del Estado democrático”.

e) La reforma ha sido presentada como un instrumento para dar mayor poder al pueblo. Sin embargo, se acentúa la concentración de poder en manos del Presidente de la República y se favorece el autoritarismo.

f) Concluyen los obispos: “Por cuanto el Proyecto de Reforma vulnera los derechos fundamentales del sistema democrático y de la persona, poniendo en peligro la libertad y la convivencia social, la consideramos moralmente inaceptable a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia”.

5. Nosotros, el Arzobispo y los Sacerdotes de la Arquidiócesis, queremos subrayar que los obispos hablan en su condición de heraldos del Evangelio, que incluye necesariamente un contenido social; no los mueve ningún interés político, sino buscando únicamente el bien de la sociedad. A cualquier católico le incumbe el deber de conocer la palabra de sus pastores, y meditarla en lo íntimo de su conciencia. Por lo demás, cualquiera que estudie el contenido de la propuesta de reforma podrá darse cuenta si lo que dicen los obispos es cierto o no.

6. Concluimos reiterando “nuestra disposición a favorecer el diálogo constructivo, y a seguir trabajando en cumplimiento de nuestra misión evangelizadora, para que Venezuela sea realmente de todos, y caminemos juntos por los senderos de la verdad, la justicia, la libertad y la paz”.

Invitamos a todos a una perseverante oración para que la concordia y el respeto mutuo reinen entre los que habitamos esta patria, que el Señor ha confiado a nuestra responsabilidad, a cuyo progreso todos hemos de contribuir y cuyos valores fundamentales todos hemos de defender.


+ Merdado Luis Luzardo Romero
Arzobispo de Ciudad Bolívar
y los sacerdotes de la Arquidiócesis.

Ciudad Bolívar, 13 de noviembre de 2007

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